Una vela para el diablo no es suficiente. El fuego del infierno corroe en el interior del demonio predilecto.

martes, 14 de junio de 2011

My angel..

"A veces vas andando por la carretera, y te sientes perdido, no llevas dinero, ni móvil, los coches apenas pasan, pues te adentras en una alta hora de la madrugada, y te dejas guiar por el instinto, caminas, caminas a un lugar sin sentido, y de repente, cuando fijas tus ojos en la inmensa resplandeciente luna, tu mente es aturdida por imágenes, conversaciones, susurros, sensaciones..
De repente, miras a tu alrededor, todo te es tan familiar tan nostálgico.. Y allí estás, conduciendo tu coche hacia algún pub, te giras y escuchas su sonrisa burlona, sus quejas chulescas, tu forma de mirarte de reojo, una noche cualquiera.. Una noche que marca un antes y un después.
Sonríes por inercia, y sacudes tu cabeza, eso.. Eso no está bien, no es bueno pensar en el pasado, y sigues andando, de repente, te sientes aturdido nuevamente, y el flashback se desarrolla en una habitación desconocida, y recuerdas dónde estabas aquella noche, una sonrisa y una palabra que te dolió, pues ya le querías pero apenas le conocías.
Sigues volando por el tiempo, aceleras, retrocedes en los recuerdos, una pared, dos manos enlazadas y unas bocas jugando a ser una, los labios fusionándose por la temperatura, un gemido de placer, un delirio de lujuria.
Y cambias de posición, allí estás temblando sobre su cama, la cama de un desconocido que ansía recorrer y devorar tu cuerpo lentamente, hacerte suyo, poseerte pero para siempre.. Sacudes tu cabeza, niegas los recuerdos ‘¡Vete!’ gritas al viento, pero estás sólo, sólo en una carretera, caminando en tus recuerdos, recorriendo tu pasado. 
El cálido aliento, se mezcla con la fría noche desvaneciéndose en el vaho, tu grito se volvió silencio, tu dolor, plena con fuerza tu cuerpo, y tus ojos… Tus ojos… Te delatan con tanta verdad, lloras.. Lloras por eso que tocaste y no vas a volver a tocar, lloras.. Por eso que tanto te duele pero no puedes evitar, lloras.. Simplemente lloras, por lo que pudo un día pasar, y lloras sobre todo, por eso que ya no volverá..."

Soul.

sábado, 7 de mayo de 2011

Todo lo que debes hacer es ponerte los cascos, echarte en el suelo y escuchar el CD de tu vida, pispa tras pista, ninguna se puede saltar, todas han pasado y de una forma u otra servirán para ir hacia adelante. No te arrepientas, no te juzgues sé quién eres, no hay nada mejor para el mundo.
Pausa, rewind, play, aun aun y aun más, nunca detengas tu reproductor, sigue registrando sonidos para lograr explicar el caos que tienes dentro.
Y si te sale una lágrima cuando las escuches, no tengas miedo, es como la lágrima de un fan cuando escucha su canción favorita. 

lunes, 25 de abril de 2011

Yeah, demasiado tiempo sin actualizar, han pasado tantas cosas, que nisiquiera he tenido ganas de sentarme a pensar qué poner, qué escribir o qué dedicarle algo a alguien.
Pero.. Creo que es hora de hacer algo por lo que de verdad merece la pena, por mi familia, por los seremos que amo, por mi nuevo hijo, por mi actual pareodo ésto, y todo ésto, es lo único que necesito para mantenerme de pie día a día.

Mi 24 de abril, mi bebé.







Bievenido a la familia, Etham.











El 24 de abril, éste pequeñajo apareció en mi vida.
Con un llanto desgarrador, pues lo arrebataron de mi vientre para traerle a éste mundo.
Te amo mi gordo.












Mi perfecto novio.






  
El 13 de marzo del 2011, éste ser tan magnífico, se hizo dueño de mi vida, conllevando ésto a hacerme el hombre más feliz de la tierra.
Me ama, me cuida, me mima, me protege, se preocupa, y es el padre de mi bebé, ese bebé que me resucita con cada llanto cuando el agobio me hunde completamente.
Sus labios, silencian los míos con un beso, sus brazos, rodean mi cuerpo para decirme que todo va bien, y me niego completamente, me niego a perder todo lo que tengo. Te amo mi vida, tú y yo para siempre.



jueves, 7 de abril de 2011

Siente como viene, siente como se va.
Es sencillo, rápido aunque doloroso para olvidar.
Nada es para siempre, ni si quiera el dolor.
Cuantas más hostias te metes, más fuerte te vuelves.

lunes, 28 de marzo de 2011

domingo, 13 de marzo de 2011

Wake up.

Alguien, desde lo más profundo de tu interior, te gritas para que te eleves, para que despiertes, para que vuelvas a sonreír.
Alguien lejano, cercano, da exactamente igual, te sigue gritando para que des un pie frente a tu nuevo empezar.
Borrón y cuenta nueva.
Un suspiro, dos tres... Los necesarios para olvidar y volver a comenzar.

This my new life.

domingo, 20 de febrero de 2011

It's time to say goodbye...

No hace mucho tiempo, me he despertado entre un mundo diferente, un mundo mágico.
He aprendido a sentir, y que los hombres, también lloran, sufren y aman... Tantos errores cometidos y aunque los haya enmendado cada uno de ellos... Nunca ha sido suficiente. El daño que he causado, siempre ha sido mayor de lo que podría ser...
Siempre me he calificado como un hombre que le gusta amar y ser amado. Pero me he dado cuenta que de hombre, tengo poco. Cualquiera se avergonzaría de ser humano teniéndome a mi por ejemplo.
No pretendo justificar mis hechos, no quiero que nadie sienta pena por un ser tan repulsivo como yo.. Nada de nada..
Nada porque no merezco ni una efímera lágrima. No merezco ni un suspiro de dolor, ni un te quiero ni siquiera un quédate..
Porque no lo haré, porque se ha acabado, porque a veces, hay que ponerle fin a las cosas... Llega un momento, en que te agobias de ser el monstruo el malo, y gritas desde tus entrañas, que no puede más. Que quieres hacer las cosas bien por una vez.. Pero es demasiado tarde como para enmendar los errores, como para pedir perdón como para que te perdonen..
Y no, tampoco sería justo... Por eso... Por eso tengo que irme, alejarme de todo... Absolutamente de todo...

Leiden: Mi gran hermano mayor. Han sido tantos recuerdos, tantos momentos buenos, y tan poco malos... Hace más de un año que he tenido la gran suerte de conocerte, de sentirte como un buen amigo, de que me escucharas y viceversa. Estar ahí... Me has enseñado tantas cosas sobre lo dura que es la vida, me has enseñado, que rendirse es lo último que se debe hacer... Me has enseñado e indicado cuando he debido de ponerme los pantalones en cada una de las situaciones correspondientes... Aunque a pesar de repetírmelo una y otra vez... Jamás he sabido hacerlo de forma correcta... Pero se agradece, se agradece tener un amigo tan sabio, que sabe tanto de la vida.. Que sabe cómo y cuando hacer las cosas para que salgan bien.. Y no soporto, odio tener que despedirme de ésta forma.. Incluso odio tener que renunciar a todos los recuerdos y momentos de ésta forma... Pero mi caballo, ya no puede tirar de mi carro, lo siento...

Hölle: No he tenido el fuerte placer de conocerte tanto como me hubiera gustado. Sí, es cierto que estuvimos juntos y que te considero otro hermano mayor por la experiencia, por cosas que tú y yo sabemos...
Sé que últimamente, apenas hemos hablado e incluso, que llevamos meses sin hacerlo... Pero en gran parte es por mi culpa y lo sé. Lo sé, pero eso no quiere decir que no te eche de menos, porque para ser sinceros lo hago y muchísimo... Aunque no he tenido el suficiente valor o supongo que el evadirme de la humanidad me ha limitado a enseñar mis fuertes sentimientos últimamente... Pero sólo quiero que sepas, que te quiero, que te quiero muchísimo... Y que sí, que hace también más de un año que nos conocemos... Y que te he sentido como un mejor amigo, como un hermano, incluso como un padre, porque siempre, siempre has estado allí para ayudarme cuando fuera necesario... Cuídate... Te quiero...


Don Tom: Vaya vaya... Una de las personas que más me conoce aquí... Una de las personas que más ha tirado de mi, aunque mis fuerzas escasearan por completo. Pero siempre, siempre has sabido como y cuando, jalar de mis manos para sacarme de la profundidad de los posos más horripilantes en los que me he caído. Probablemente seas de las personas que más me ha conocido, ya sea porque entramos casi juntos y nada más conocernos congeniamos a la perfección como un gran hermano... Y te lo agradezco todo, todo lo que has hecho por mi, porque sé que me quieres... Pero Don... No se me puede resucitar de entre los muertos... Deja de emparanoiarte tanto, y déjame desplegar las alas... Volar, e irme.. Irme lejos, te lo suplico.. No quiero que me retengas más de lo debido, ya ha sido suficiente, ya me has tenido mucho tiempo entre tus brazos y todo el que has querido, ahora, ahora déjame ir, si me quieres es lo mejor que puedes hacer... Siempre voy a estar a tu lado, pase lo que pase y de la forma que sea... Te quiero, te quiero mucho...

Psycho: Psycho... Mi adorable y perfecto psicópata... Eres tan dulce bebé, eres tan perfecto, que me molesta, me molesta el hecho de tener que abandonarte, ya que te juré, te juré que siempre permanecería a tu lado. Sé que he fracasado muchas veces contigo, sé que incluso te he dañado, pero para alejarte de mi, porque no soy buena persona, y lo sabes perfectamente... No te he permitido dejar crecer los sentimientos, cuando podría haber sido algo precioso... Pero el pasado, forma parte del pasado y debe quedarse estancado atrás. Eres feliz mi pequeño, sé que lo eres y no me necesitas tanto como crees. Sé que no me necesitas. Sé perfectamente, que pronto, pasaré a ser un vago recuerdo entre tus pensamientos...
Mi pequeño héroe de pacotilla, te quiero tanto, pero tanto... Gracias por todos y cada unos de esos momentos, en los que me has tendido entre tus brazos para ayudarme a dejar de sufrir, tu calidez humana, siempre tan perfecta...

Abney: Vaya... No me odies, te suplico que no me odies.. Sé que me quieres y sé que no quieres que me vaya Abney... Has sido en los últimos días, una de las personas que más me ha apoyado, que más me ha tenido entre sus brazos para intentar ayudarme a despejar mi mente de tantos malos pensamientos... Me duele que tu actitud sea distante, pero supongo que debo comprenderlo, supongo que tanto a ti como a mi, nos duele distanciarnos, porque en poco tiempo, hemos creado un fuerte enlace de amistad... Pero por desgracia, en mi mundo, las cosas siempre tienen un final, feliz... O triste, nunca lo sé, pero todo lo que empieza debe acabar, y tú y yo lo sabemos perfectamente.
Tantas risas, tantos momentos de ánimos, tantos abrazos, tantos te quieros, tantos mismos y tantas explicaciones insensatas... Pero se quedan atrás, se quedan atrás para dar formar unos cuantos y preciosos recuerdos... Te quiero mucho pequeña langostilla... Muchisimo...

Toxic: Sé que me odias, que no me quieres ni ver muerto como claro me lo has dejado... Sé que nuestra amistad, se ha ido apagando con el tiempo, sé que no confías en mis palabras sé que probablemente ya ni me quieras por el daño que te he causado. Pero si lo he hecho... Joder, si te he dañado, no ha sido porque he querido, ha sido porque son necio y cabezón, no soporto sentir que te lastimo, porque sabes perfectamente lo mucho que te quiero, lo mucho que has significado para mi.
Eres el padre de mis primeros hijos, el hombre que me enseñó a sentir, el que básicamente, me ha enseñado muchísimas cosas que me han servido en ésta vida. Cuando te vi por primera vez, ya pasa a ser un vago recuerdo entre mis pensamientos, pero lo recuerdo, lo recuerdo porque fue especial... Y hace también, mas de un año que te conozco, y no importa, para mi ha sido como ayer.
Hemos pasados muy buenos momentos, llantos de tantas risas... Como también lágrimas de angustia y dolor... Sé que te he causado daño muchas veces... Y sé que no puedo remediarlos tras mucho tiempo... Pero quiero que recuerdes una cosa Toxic, que te quiero, que te quiero muchísimo, y aunque las cosas no estén bien... No lo olvides porque yo nunca te voy a olvidar... Te quiero...

Diem: Vaya, mi amigo especial... ¿Qué es de ti? En realidad, no se nada de ti desde hace tiempo, puesto que las cosas no acabaron bien. Y por más que me he enterado de ciertas cosas que me han dolido, cosas que has dicho detrás de mi cuando éramos amigos... Cosas que me han arrebatado más de una lágrima, no importa, no importa porque te quiero.
Siempre hemos tenido muchos altibajos en nuestra amistad, incluso cuando estuvimos juntos, pero los bajos, los bajos no importan. Yo siempre recuerdo los buenos momentos, para mi son los más importantes, son los que cuentan...
Recuerdo el día que te conocí, aunque en realidad era en plena madrugada... Borderías, discusiones de estúpidos apelativos, y ángeles informáticos de por medio... Vaya, que cosa más rara ahora que lo pienso. Fue extraña la forma en la que te conocí, pero no importa. No importa porque te quiero, y porque conocí a una persona maravillosa...

Kendra:  Mi preciosa princesa. Sé que no hace mucho que nos conocemos. Pero hemos compartido buenos momentos, sonrisas y también tristezas. Pero lo más bonito de todo es que siempre has estado ahi, aunque no me conocieras del todo. Te has arriesgado por mi amistad, a pesar de las habladurías que se sueltan. Pero no te has dejado llevar por ellas, si no que, te has dejado llevar por conocerme.
No tengo mucho tiempo para decir, lo mucho que te quiero y cosas que ya no sepas, porque prácticamente, sabes que cuando tú estás mal, me es inevitable no estarlo. Te adoro mi princesa, muchísimo.

Heidi: Mmh... La chica mala que atentó contra mi un par de veces lkamslkmas. Te adoro pequeña.
Tú me has enseñado, que no importa quién seas o lo que hayas hecho, siempre hay tiempo para perdonar, porque las cosas malas nunca son para siempre, y que las malas fachadas ocultan como es una persona en su interior. Te has arriesgado a conocerme, y yo también, pero lo cierto es que no me arrepiento en lo más mínimo, porque me he dado cuenta de que te adoro, de que eres una persona maravillosa, y me amarga la existencia que no seas feliz por tus circunstancias.. Pero recuerda, que la felicidad está donde menos te lo esperas, te quiero, mi borracha.

Seek: Mi gordo... Vaya, ¿cuidarás de Brian? Ya he dejado de darle de comer carne para que no sea un mal perro. He seguido tus consejos ¬¬. Pero bueno mi pequeño.
Tantas y tantas risas, por dios, es que, es inevitable no reírse aunque estés jodidamente hundido... Siempre has sabido como sacar una sonrisa para iluminar aunque sea lo mínimo mi día...
Incluso nuestras charlas a las 7 de la mañana... Quien nos oyera, pensaría que estamos realmente cínicos. ¿Quién se ríe a esas horas? Sólo tu y yo.
No he tenido el placer de conocerte antes, pero sé que eres una persona maravillosa porque es lo que me has enseñado. Te quiero MUCHÍSIMO. Y sigue adelante, te lo mereces.

Chupame: Mmh... Sádico, adorable, borde, precioso... Mira que me ha costado conocerte, un año prácticamente, un año entero me ha costado mantener una conversación contigo.
Pero es difícil mantener una conversación con tantos "mmh" y algunas ironías, que llegan a dejar mi coeficiente intelectual bastante por el suelo.
No tengo mucho más que decirte, porque tampoco es que tenga demasiado tiempo... Pero no me parecía justo irme sin decirte ni adiós, aunque.. Me hayas dejado plantado con una cena más de una vez, pero no importa. Te quiero mucho enano...

Y finalmente... Tú, que me he reservado para el final.. Para tratar mi despedida con sensibilidad... Intentaré despedirme, sin llorar, pero sé que me va a ser imposible... Y aunque seas el último de mi lista, probablemente seas el más importante... Allá vamos...

Würzig: Dios... No sé por donde empezar, y mis ojos ya ni me dejan ver con claridad... Vamos Soul, tú puedes...
Sé, sé perfectamente que te he dañado, sé que la he cagado ciento de veces, sé que he hecho tu camino difícil, aunque en realidad no deseara eso... Sé, que te he perdido y que estás sufriendo por mi culpa, y que yo también lo hago pero ya no me queda nada... No puedo hacer nada por recuperarte, porque sencillamente... La jodi, la jodi otra vez y ahora... Se acabó.
Y a cada segundo que pasa me maldigo, me insulto, y me daño, por saber que he perdido al amor de mi vida...
Porque tú eres un perfecto ángel, el más preciado de todos, eres el único y serás el único dentro de mi pecho.
Por más lo que haya hecho, por más que las cosas no estén bien... Dios Würzig, tu no sabes lo que te amo, no puedes imaginarte aunque quisieras, el agobio, el dolor y el pánico que siento.
Pánico, porque sé que ya no me amarás, porque sé, que no te tendré que no seré tuyo ni tú serás mío.
Que ya no podré decirte las veces que quiera todo lo que te amo, que me respondas con un yo a ti, que me digas cuanto me deseas... Que me añore cuando no esté y viceversa...
Siempre te he dicho, que si tu no estás, yo tampoco estaré, te he dicho que si te vas, yo me muero y efectivamente... Me estoy muriendo... Pero no me importa, no me importa porque sé que lo merezco y ahora. Ahora te toca ser feliz... Pero por favor Würzig... No olvides, no olvides jamás que te he amado, que te he amado con cada fibra de mi ser, que te amo, que te amo con cada fibra de mi ser, y que te amaré que te amaré con cada minúscula y puta fibra de mi ser...
Porque cuando menos lo esperaba, llegaste, llegaste para rescatarme, me protegiste... Y en cambio, no supe valorarte como de verdad te lo merecías. Y ahora me doy cuenta de todo.. Creí una vez más que sería fuerte, que podría vivir sin ti... Pero no, no puedo... No puedo Würzig... De verdad, de verdad que me muero...
No puedo dormir, no puedo comer, y me cuesta hasta respirar con tu ausencia... No puedo vivir... No quiero vivir si no es contigo...
Me despido por aquí de ti, por el hecho de que... Por ciertas circunstancias... No he podido hacerlo directamente. Aunque quisiera, pero supongo que es mejor mi amor... Supongo que lo es... Será menos duro para mi como supongo que para ti.. Seguramente me odies Würzig, y no sabes todo lo que me duele maldita sea, ¡pero no puedo lamentarme! no puedo... Por más que grite para intentar sacar el dolor de mi pecho, no puedo, no me sale la voz, estoy ahogado en nuestros recuerdos, estoy siendo torturado por mis pensamientos... Y sólo quiero morirme, morirme porque no puedo Würzig, no aguanto sin ti, esto es demasiado... Sólo quiero despertarme, despertarme de ésta horrible pesadilla, y encontrarme sobre tus labios una tierna sonrisa mientras tus brazos rodean mi frío cuerpo para calmar mi dolor, mientras me susurras al oido cuanto me amas... Todo lo que me necesitas... Y que sólo, sólo era una estúpida pesadilla, que la realidad es otra que la realidad... No es ésta...
Y ahora... Ahora debo irme mi precioso ángel... Debo irme lejos para no dañarte más, para poder sobrevivir, o quizás... Sólo morir... Pero te amo, te amo demasiado, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo demasiado mi amor, y eso será así, será para siempre... TE AMO JODER, TE AMO.
Siempre, y eternamente tuyo... Soul.
02/07
26/11
04/01

Te amo....

sábado, 19 de febrero de 2011

CLOSED

13 The end

Y el ángel... El ángel no llegó para salvar al demonio. El ángel hizo lo correcto, escuchó a sus seguidores, y le abandonó en pleno apocalipsis..
Quizás, eso debería haber hecho el demonio, escuchar... Y callar.
Quizás tendría que haber luchado más por su ángel predilecto... Quizás...
Pero ya no se puede hacer nada, ambos cogieron caminos diferentes: Él, será feliz dentro de un tiempo.
Pero el demonio, quién sabe... Quizás lo encuentren, y lo tomen por psicópata suicida..
Pero uno está vivo, y el otro, se murió amándole con cada efímera parte de su cuerpo...
A veces el amor es injusto y doloroso, pero es así... Y no hay marcha atrás.

Fin.

12

Tres meses... Tres jodidos meses son los que llevo esperándole, tal y como le prometí..
Los días se hacen años y los meses siglos... Le necesito... Dios, como le necesito...
Deslizo la cortina del salón con las puntas de mis dedos observando por enésima vez ésta mañana a la calle para ver si observo algún rastro de su persona, pero nada... No hay absolutamente nada.
Me desespero, me vuelvo loco por volver a perderme entre sus brazos... Su calidez tan humana, su perfección angelical.. Y sé, que esto va a acabar mal... Porque somos de mundos diferentes...
Conllevo las puntas de mis dedos hacia mis lacrimales, ejerciendo presión sobre ellos para detener las futuras lágrimas traicioneras.

-Otra vez hacéis aparición estelar hijas de puta... Iros, iros y dejadme en paz, dejad de torturarme de ésta forma...

Niego con molestia sintiendo como las pequeñas gotas de agua salada, siguen traicionándome, para derramarse sobre mi piel y deslizarse con suavidad sobre la longitud de mi rostro. Inhalo una profunda bocanada de aire, y sin más preámbulos, urgo en uno de mis bolsillos de la sudadera, en busca de mi pequeño juguete torturador. Frunzo el ceño, y dejo salir la hoja de la navaja, centelleando su brillo con la efímera luz de la luna que penetra por una pequeña rendija de la ventana.
Deslizo el filo de la misma, y la coloco sobre mis venas en posición vertical, sin miramentos, deslizo con presión sobre mi muñeca, observando como la sangre caliente, brota con desesperación, pero también, su rápida cicatrización...

-Si tuviera algo, algo, lo que sea con esencia angelical, podría matarme, y así... Acabar con éste fuerte dolor...  

Sí, desde que le he perdido, desde que se ha ido sin decir ni siquiera adiós, cada día que le he esperado, cada segundo que ha pasado, habitan en mi profunda mente, unos pensamientos bastante repulsivos y suicidas, peores de los que nadie se pueda imaginar...
Cierro el puño con fuerza para volver a clavar la punta de la navaja en el interior de mi muñeca, de forma bestial que incluso, daño los tendones que van hacia los falanges. Presiono mis labios al sentir el intenso dolor, intentando evadirlo con su perfecta imagen, pero en cambio, sólo consigo sentir un profundo escozor sobre mi piel, y la ebullición de mi sangre..

-Eres peor que un arma letal...

Presiono mis labios con agobio y agotamiento, dejando caer al suelo, el cuchillo completamente impregnado de mi sangre, a la par que veo, que mi muñeca no se cicatriza y que de ella, sale sangre, demasiada sangre...
Presiono mis labios y extiendo de las comisuras para perfilar una triste sonrisa con un pequeño ápice de alegría..

-Parece... Que lo... He conseguido...

Cierro mis ojos con fuerza, repasando su perfecto cuerpo y rostro, mientras de mis ojos, no sale más que unas profundas lágrimas de dolor y añoranza.. Jadeo de dolor mientras un charco de sangre procedente de mi brazo, empieza a impregnarse en mi blanquecina camiseta. Trago una gran cantidad de saliva, entrecortándose la respiración, para darse jadeante.

-Lucifer... Ya... Ya me puedes llevar contigo...

viernes, 4 de febrero de 2011

11º

La alarma rompe mis más profundos y perfectos sueños.
Gruño al exhalar una fuerte bocanada de aire. Deslizo mis dedos hacia mis trenzas para enredarlas entre las puntas de los mismos.
Estiro cada músculo de mi cuerpo, y bajo de la litera de apenas un brinco. Me dirijo hacia la venta y subo la persiana a tope, arrepintiéndome cuando la luz intensa del sol, daña mis oscuras pupilas.
Restrego mis ojos, mientras me abro paso en dirección hacia la cocina buscando algo con lo que matar el rugido de mis tripas.
Deslizo la planta de mi piel por la longitud de mi tibia rascando suavemente la piel, mientras me decanto por un tetrabrick de zumo de piña.
Dejo caer el líquido en el interior de mi garganta, y cuando sacio mi sed y mi hambre, lo vuelvo a cerrar para la próxima vez.

-Con esto ya tendré hasta mañana.

Me aseguro de que cada cosa está en su sitio, mientras memorizo los nombres de mis futuras víctimas.
Subo los pantalones hasta mis caderas, dejándolos perfectamente puestos, deslizo la camiseta de algodón hasta la zona de mis muslos, y desvío la mirada para cerciorarme de que mis alas están donde deben estar.

Envaino mi espada y busco las llaves de la casa.  Cuido una vez más de que cada cosa esté en su sitio y le echo un último vistazo a mi lista. Asiento tranquilamente, y me encamino atreves del oscuro pasillo con sólo una frase en mente "se acabó".
Eso fue lo que exactamente he decidido anoche, olvidarle, arrancarle de mi vida y no volver a saber de él. Al menos eso es lo que quiero. ¿Que si me lo cruzo cuando regrese?
Pues le mataré.
No me importa.
Mi sangre se enfrió, y los demonios no se pueden mezclar con los ángeles, ni para tener una bella amistad, asi que si no me deja en paz, le mataré.
Sé que suena contradictorio, porque ayer le quería y hoy le odio.
Le odio por quererle, eso es cierto. Odio porque él ha roto mis planes, todo eso que me enseñaron desde que era pequeño, esas cosas que debía hacer en el momento justo.
Y no me importa, es lo que me dictaminó mi padre al entregarme ésta espada con una empuñadura de oro, y la voy a hacer valer.
Ningún estúpido ángel vale ni la cuarta parte de ésta espada. A si que, es momento de hacer brillar su valor en el viento y que el sol la haga destellar.
Inhalo una fuerte bocanada deileitándome del aroma a sangre que desprende mi novena víctima, y evacúo una cínica carcajada que retumba en cada uno de los recovecos de ésta oscura habitación.
Flexiono mis rodillas y me dejo elevar para atravesar la ventana y acabar con mi trabajo, volver a casa pronto. Sólo me queda éste mierda y podré volver a casa. A mi dulce hogar.
Suspiro con fuerza, y me encamino por un callejón oscuro, sintiendo como poco a poco la esencia angelical, me repugna, me asquea y me debilita... "Son muchos.."
Exclamo para mi anterior, cuando los diviso desde el rincón más oscuro. Sin conteo por encima, puedo percibir la presencia de 9 ángeles, que van a su completa bola, pero yo no tengo que matar a los 9. Sólo tengo que matar al jefe de la manada.
Desenvaino mi espada para sujetarla por la empuñadura dorada entre mis dedos. Suspiro con fuerza y en un momento de despiste, salgo de mi escondite para enfrentarme a dichos ángeles. Si tengo que matar a los 8 para matar también al jefe, lo haré... Me repugnan, malditos ángeles.
Despliego mis alas y dejo brillar la espada por la luz de un farol. Aproximo mi postura, y conteo nuevamente los cuerpos de mis víctimas: 8. Falta uno, ¡maldita sea!
Niego suavemente y me aproximo al jefe para amenazarle con la punta, rozando su cuello para quemar su piel con la esencia.

-Voy a matarte maldito bastardo. -Gruño entre dientes mientras siento su repugnante esencia colarse como el ácido por mis fosas nasales. Suspiro con fuerza ladeando el rostro, y corto su piel con el filo. Curvo una sádica sonrisa sobre mis labios y me enfrento a los restantes a base de insultos y especulaciones.- ¡Vamos malditos bastardos! ¡Venid a por mi, venga jodidos cobardes! -Les observo completamente exasperado cuando contemplo que yacen completamente fijos en su sitio.

Nada. No sucede nada. Comienzo a sentirme realmente estúpido. Pero no de mueven, ni siquiera hablan sólo me miran sin mover un dedo alguno.

-¿Qué quieres? -Uno de ellos eleva su rostro amenazando con sus gestos. Deslizo mi espada para apoyar la punta en el suelo contra mi cuerpo, cambiando mi postura a una completamente chulezca.
-Mataros. -Evacúo una nueva sádica sonrisa que retumba en cada uno de los recovecos de éste callejón.
-Pues empieza.

Una de las voces retumba a mis espalda de forma que me despisto, volviendo a sujetar mi espada por la empuñadura. Apunto hacia el ángel que yace detrás e inhalo una fuerte bocanada de aire.

-¡¡Joder Lucifer!! ¿De verdad me tengo que ensuciar las manos con estos mierdas? -Vuelvo a sonreír con superioridad. Deslizo mi labio superior por la longitud del inferior mordiéndolo finalmente con el filo de mis dientes.- Muy bien vamos a ello. -Elevo mi espada para aproximarme hacia uno de los ángeles.-
-¿Qué cojones estás haciendo?

Helado... Me quedo completamente helado cuando oigo su voz. No puede ser... ¡Me estoy volviendo loco joder!
Sacudo la cabeza de lado a lado y vuelvo a recuperar mi postura para amenazarle con la esencia. Jadeo con fuerza y elevo la empuñadura para matarlo de una. Pero algo, me lo impide, más bien alguien.

-¿Por qué lo haces?
-¿Y tú... Tú qué cojones haces aquí?
-¿Que qué hago aquí Soul? Pues es sencillo de explicar, a quienes intentas matar son mis amigos... A si que para matarlos a ellos debes primero acabar conmigo.
-No me lo pones complicado.
-Cómo veas.

Frunzo mis hombros y deslizo la punta de mi espada por su pecho observando como el ácido de la esencia quema su piel. Presiono mis labios y ladeo el rostro con constancia. Separo la punta y la coloco sobre su corazón e intento atravesarle el pecho.
Gruño, gruño y otra vez. Pero no puedo...

-¡Que te jodan!

Envaino mi espada y me pierdo entre la oscuridad desapareciendo completamente de ese callejón.
Impulso mi cuerpo con los codos abriéndome paso entre el aire, para perderme completamente en la ciudad.
No tardo en llegar a mi casa, coger la botella de tequila y me dejo caer en una esquina de mi habitación.

-Genial, me he sentenciado.

Trago una fuerte cantidad de saliva sintiendo el escozor del tequila cuando se mezcla con mis propios líquidos.
Pero sólo me apetece beber, al menos, disfrutaré de una buena borrachera cuando llegue mi última hora.
Frunzo el ceño y deslizo mi espalda por la longitud de la pared hasta tumbrarme en el vacío salón de mi casa.
Apenas la luz blanca de la luna, perfila mi silueta y la de la botella medio vacía, puesto que su alcohol restante ya recorre cada parte de mi cuerpo intercambiándose con la sangre.
Entrecierro los ojos y un par de lágrimas traicioneras, se deslizan por mis mejillas, para deslizarse una a una con fuerza...

-¿Por qué todo lo peor me sucede a mi? Maldita seas jodido idiota.

Vacío el alcohol en el interior de mi boca, para tragarlo a buchas y suspiro con fuerza, estallando en una fuerte angustia que rompe con el silencio de mi habitación.
Pero todo se paraliza incluso mis lágrimas.
Un tacto cálido, rodea mis hombros y el latido fuerte de un corazón calma mi respiración.
Cierro los ojos con fuerza, negando la realidad por unos instantes.
Elevo el rostro para observar de dónde proviene la calidad y cierro mi puño en la tela de su camiseta. Apenas separo mis labios para gesticular algunas palabras ebrias consiguiendo con vagueza pronunciar..

-Te quiero.

Sus blancas alas rodean mi cuerpo, intercambiando esencias, sientiendo un mutuo dolor pero un fuerte sentimiento.

-Shht...

Apenas susurra desde sus cálidos brazos, pero yo.
Yo me siento completamente imunisado...

martes, 1 de febrero de 2011

10º

Hace varios días que no sé nada de él.
Nada.
Y cuando digo nada, es NADA.
Aunque lo cierto, es que tampoco estoy por sus lares... Si no que me he venido al país de la pasta y de los hombres con artillería.
Sí, ahí mismo, La bellisima Italia.
Puede que sea por razones de misiones. Pero no le he visto ni la punta de sus trenzas.

Sí, Itialia es hermosa, los paisajes, el amanecer, el anochecer e incluso la sucesión del día. Su principio y su fin. Tan bella... Pero más bello es él.
Y lo cierto, es que pase un día, dos o tres... No soy capaz de arrancarle de mi mente. Aún yace en un pequeño recoveco, su mirada triste desde aquella ventana... Y sigo sin comprender qué es lo que he hecho mal... Sólo he intentado hacerle ver que le quiero... Pero supongo que no es una agradable forma la mía. El espiarle contsantemente y agobiarle, acribillarle a mensajes telepáticos. Supongo que es cierto eso de que los demonios no sentimos.
Y supongo que es cierto, que se rumorea por los infiernos mi "romance" con un arcángel. A si que también supongo que por eso estoy en Italia, y no bajo su portal. Las misiones... No me extrañaría que me salieran tantas. Según uno de mis amos estoy bastante "vago" y un demonio no se gana la vida conquistando, o sastifaciendo sus necesidades vitales como el buen sexo. Si no que todo lo contrario. Asesinando a ángeles.
Y eso he hecho éstos últimos días. No me ha sido difícil. Por alguna u otra razón están más que débiles. La plaga comentan algunos, es como... La peste negra hace unos cuantos siglos atrás. Me falla la memoria para ser con exactitud -supongo que me podréis entender, los humanos a veces ni recuerdan lo que han hecho el día anterior o mismamente qué han desayunado, como para recordar más de cien guerras y doscientas batallas. Para ser sinceros, mi mente no es un pendrive que almacena de forma masiva en su interior. Ni tampoco consto de 16 GB, y la facilidad de copiar y pegar información dentro de un archivo para saberlo tal cual. Pero... ¿Sinceramente? Poco me importa.
Sin desviarme del tema...
Los ángeles están cayendo uno a uno, y la ley de compensación, -como dice el Libro de Enoc-, nos deja como una gran mayoría, puesto que La Plaga no nos afecta en lo más mínimo.
Reviso mi lista de ángeles caídos, ceriorándome de que mi trabajo no está muy mal hecho.
Finalizo la primer lista de nombres, tras tachar cada uno de los ángeles con un bolígrafo rojo. Inhalo una fuerte bocanada de aire, y rasgo con una navaja el sobre que me llegó ésta misma mañana.

-Otra jodida lista...

Babuceo entre regañadientes mientras leo por encima cada uno de mis futuras víctimas de batalla.
Inhalo una fuerte bocanada de aire observando con indiferencia cada uno de ellos.
Apago la luz de noche y hundo mi cuerpo debajo de los endredones a pensar, mientras presiono el folio contra mi pecho.
Sí a pensar... A pensar en él.
Sacudo la cabeza y frunzo el ceño a observar su rostro tan resplandeciente en el regazo de mi techo...

-Jodido ángel adorable...

jueves, 27 de enero de 2011

Mmh...
Definitivamente sé que lo amo,
               definitivamente, sé que es él.
                                ¡Hey! ¿sabéis una cosa?
                                              


                            ¡¡ESTOY JODIDAMENTE ENAMORADO DE WÜRZIG!!

miércoles, 26 de enero de 2011

Porque con sólo verle, mi cuerpo se dedica a temblar.
Porque con sólo sentirte, mis labios sólo quieren besar.
Porque con sólo amarle, mi corazón no puede parar.

Te amo, mein viertes.

martes, 25 de enero de 2011

No tengo excusas para justificar mi actos.
Ni tampoco justificaciones para elaborar buenas excusas.
No tengo nada, nada de lo que pueda ofrecer, ni mucho menos,
la decadencia de ejercer a ser, es todo lo que me queda..

Pero sé, que si me pinchan, voy a sangrar..
Sé que si me odian, me voy a molestar.
Sé que si me aman, me voy a enamorar.
Sé que si siento, voy a resucitar.

Puede que esté completamente equivocado,
puede que sólo haya fallado.
Puede que llore, que grite, o que me sienta torturado.
Pero sé, que jamás, podré volver al pasado.

Cien raices crecieron en mi jardín,
que hicieron de él un lejano valdío.
Sé que si puediera resucitar de el infierno
y ponerle un fin a todo esto,
sé que lo haría, sé que no tardaría ni un pio,
de un cantar alegre.

Demasiadas lágrimas he llorado,
por ti, mi amor, sólo por ti he derramado.
Y cientas lágrimas son cortas para mi amado,
pues más de miles, él se ha ganado.

No me llaméis hipócrita,
ni siquiera podréis entender estas estrofas.
Pero oculto, muy oculto a lo lejano.
Hay un verdadero sentimiento muy enterrado.

Dolor, pena y sensación de añoro.
Mas plena en el interior de mi pecho, la sensación de agiobio,
pues, ciento una lágrimas he dado por perdido.
Más miles de lágrimas, futiristas perdidas estarán.

Oh por dios, maldito dolor eterno.
Te clavaste tan adentro,
para matarme,
torturarme,
y posiblemente aniquilarme,
pero nada, será tan fuerte...
Como el amor, que llevo engatuzado en mi eterno corazón.


That's only for you Würzig...
I will always love you..


Your eternal Demon.
 
             Your eternal Soul.


P.d: I love you.

domingo, 23 de enero de 2011

Mi lugar predilecto es el infierno.
Sólo soy un arcángel maldito, siervo del señor de las tinieblas.
Puede que me lleve un premio por hijo de puta.
Sólo quiero recibir mi castigo por ello..


Te amo... Te amaré eternamete Würzig..
A veces no sabes qué es lo correcto.
Qué está mal.
Qué haces bien.
¿Sentir es bueno?
¿Odiar es malo?
Quién sabe.

martes, 18 de enero de 2011

"You'll never make me, because the world, will never take my heart.
You can try, you'll never break me, you want it all, you wanna play this part.
I won't explain or say I'm sorry, i'm unashamed, I'm gonna show my scar.

Give a cheer, for all the broken, listen here, because it's only you.
I'm just a man, I'm not a hero
I'm just a boy, who's meant to sing this song
I'm just a man, I'm not a hero
I  don't  care".


Apenas podía percibir en la distancia la melodía con una letra intensa entrelazada.
Las gotas de la lluvia repiqueteaban en mi rostro mientras apenas provocaba movimiento de algún tipo al mantener mi posición rígida contra la pared.
La punta de la espada envainada perforaba suavemente mi piel a causa de la presión con la cual pasaba de la vida.

Podría decir que me sentía muy observado, puesto que las horas transcurrían constantemente a mi alrededor. Pero supongo que la desesperación, no me permiten mover ni un mísero músculo de aquí hasta que lo vuelva a ver.
La mísma vecina que ya ha vuelto de hacer las compras, el mismo portero que se piensa que soy un terrorista...

-¿En serio no quieres subir?
-No gracias, estoy esperando a mi novia.
-Pero vas a engriparte -qué irónico- al menos ponte una chaqueta.
-Señora, ¿usted entiende lo que es un jodido no? Pues tire, y dejeme en paz.

Sí, sé que no tenía la culpa para que pagara con ella, pero... En este momento me encuentro jodidamente desesperado por volver a saber de él.
Y sé, sé perfectamente que la cagué en el momento de decirle a él, que se largara de mi vida...
Si pudiera volver al jodido pasado... Espera, ¿qué pollas ha sido eso?
Puedo percicbir el movimiento de las cortinas un par de pisos más arriba de dónde me hallo.
Me siento igual de observado, pero aún más intrigado.
Retrocedo lo justo como para poder observar con claridad, ¡maldita sea! si está ahí en la jodida penumbra.
Bien, vamos, lárgate ya, ya le has visto.
Pero me es imposible poder moverme, no puedo dejar de observarle.. Es tan perfecto es tan...

lunes, 17 de enero de 2011

Puedo sentir claramente la sensación de angustia.
Esos pequeños pero intensos cuchillos puntiagudos que se clavan en tu garganta, y por más que intentes tragar una pequeña cantidad de saliva, te duele, te desangras...
A sí me he despertado. Con ganas de matar al mundo, y no, ya he descartado la posibilidad de catarro o plaga; los demonios no nos enfermamos, simplemente somos inmunes a cualquier enfermedad pero...
Me duele.
Supongo que si fuera humano, claramente tendría las "anginas" hinchadas, o una fuerte gripe. Pero estoy seguro, que se llama angustia.
Porque a pesar de dolerme el cuerpo. Tengo los ojos húmedos. Empapados por pequeñas gotas de lágrimas y no puedo comprender el por qué.

Cierro el puño con fuerza y lo apoyo suavemente contra el borde de la ventana para observar con calma el panorama que me ofrece la ciudad.
Es tan apagado y triste. Tan gris...
Y... Seguramente, éste es el tipo de día que me encanta. Pero hoy no, hoy me siento más humano que nunca.
Y me siento triste, siento que... Tengo sentimientos... Y no precisamente de odio, si no que... De amor.
Me estoy volviendo loco maldita sea.

Dejo caer mis rodillas sobre la moqueta, y presiono mis ojos con las puntas de mis dedos. Te necesito, sé que te necesito.
Niego suavemente de lado a lado en busca de una respuesta del silencio con exasperación.

-¿Por qué...? Esto no puede estar sucediéndome. Soy un jodido demonio, un arcángel del infierno, ¡maldita sea!

viernes, 14 de enero de 2011

Uhm... Un sentimiento fuerte y potente.
     

                          Un sentimiento que se llama amor.
Tomarse un respiro: Siempre es bueno para saber continuar.

jueves, 13 de enero de 2011

14.

Ein tag.
My eternal forteen.

My soulmate.

A veces, cuando creemos que hacemos lo correcto nos equivocamos, por el mero hecho de pensar con la cabeza y no con el corazón.
Por lo tanto, volvemos al mismo punto del principio. Nos fiamos de las nuevas personas que entran en tu vida, que no te conocen de nada, pero por su "experiencia" les seguimos la corriente.
¿Experiencia de qué? La experiencia que cuenta es la amistad que se basa en la fuerza del perdón y el sentimiento.
Y estás jodidamente equivocado por el hecho de que  arriesgas una fuerte, veterana amistad por estúpidas palabras que te carcomen la cabeza, y lo peor, es que te crees que es lo correcto.
Te crees que todo estará bien un sencillo "te lo prometo".
Pero no es así hostia puta, no lo es. No lo es por el hecho de que de verdad quién te quiere, es quien te da una de cal y canto. Que si está enfadado contigo, y te ve mal, se le borra el ceño fruncido y te sujeta entre sus brazos, que a pesar del daño que le hayas causado, sabes que te va a proteger, porque nada ni nadie va a cambiar los orígenes que nosotros vamos sembrando durante el trayecto amistoso.

Por eso, aquí y ahora.
Quiero pedirle mis más sinceras disculpas a la persona más importante de mi vida.
Porque a pesar de todo y tras un año, seguimos juntos sujetándonos de la mano para cruzar monzones, cruzar tormentas y huracanes. No importa.
Porque el fuerte sentimiento, la sensación de la necesidad mutua de estar cerca para complementarse.
Siempre, siempre, volveremos a nuestros orígenes. A pesar de que el "odio" caiga sobre nosotros. El perdón y el querer, siempre será más fuerte.

Te adoro mi pequeño Toxic.

Cuchicuchi.






Porque siempre pase lo que pase.
                        Nunca se olvida el verdadero sentimiento de amistad.



Kaputt.

miércoles, 12 de enero de 2011

Observo detenidamente cara rincón de la habitación por enécima vez. Nada...
Se ha ido, y lo más cojonudo, es que no puedo largarme. Las paredes están construidas por material angelical, en contra de los demonios, con intentar escaparme, podría matarme sin pestañear, ¡una maldita pared!.
Niego una y otra vez, pero él no aparece, y no puedo llamarle, aún no sé su nombre. Por lo tanto me toca esperar como un "buen" samaritano. Bueh... Sí, es discutible.

Dejo caer mi cuerpo exasperado sobre las mandas de seda, en espera de que éste se aparezca de un momento a otro, como mínimo.
Exhalo una fuerte bocanada de aire y entorno mis ojos en mis cóncavas hasta dejarlos completamente blancos. Mmh... Tengo hambre.
Acto seguido, me da por merodear su congelador ¡Violá! no hay nada, aunque no me es de extrañar.
Tiene una imagen perfecta como para meterse algo en el cuerpo. Y no me sosprendería, que tampoco se meta ninguna droga. Y si soy sincero, yo no puedo vivir sin ellas desde el momento de tu excelente creación.

-No me hace falta meterme de esas cosas para ser feliz.
-Hijo de puta...

Presiono mi pecho con la palma de mi mano a causa del susto. 'No puedes darme estos sustos, avisa antes de hacer estas cosas'. Como es obvio, no gasto saliva en hablarle.

-¿Tanto me necesitabas?
-Tengo hambre, dame algo o ábreme la puerta.
-Mmh... Muy bien.

No, pero... ¿Qué hace?
Dejo evadir mis pensamientos con imágenes de la Torre Eiffel, Big Bang, y otros monumentos ocultando en mis propios pensamientos, lo que quiero para que él no se de cuenta.

-¿La Torre Eiffel?

Frunzo mis hombros y observo como detenidamente gira la llave en torno a la cerradura. La abrió.
Presiono mis labios entre sí ientras envaino la espada a mi espalda.

-¿Te volveré a ver?
-Mmh... ¿Tú qué crees?
-No te quiero en mi entorno, tú eres bueno y yo soy malo, no estaría bien visto.
-Perfecto, adiós.
-Bye...

Cierro mi puño con fuerza crujiendo mis dedos uno a uno a causa de la rabia.
Niego suavemente y me pierdo en la oscuridad del pasillo, la densa oscuridad...
Inhalo una fuerte bocanada de aire y me entorno cercionándome de que no puede oirme, y así pensar tranquilamente.

-Cojonudo, me cago en el bien y el mal, me cago en las diferentes razas, me cago en mi puto padre.

martes, 11 de enero de 2011

Es un sentimiento demasiado fuerte para ser verdad.
Es una sensación demasiado especial para pertenecerme.
Él es demasiado perfecto para ser mío.
Es un número muy significante.

Él es mi perfecto cuatro.

                             Él es mi perfecto Würzig.

Definitivamente, cuando digo, que éste ángel ha perdido la cordura, es que la ha perdido y no hay vuelta de hoja.
¿Sentimiento? ¿Sentimiento de qué? Sólo conozco el de odio, el de rencor, el de venganza, el de la destrucción -si a eso se le puede llamar sentimiento, claro está-.
Me pone enfermo que hable con tanta parsimonia, que su lavia sea tan calmada. Me pone jodidamente enfermo... Mirarle a los ojos y observar que no tiene problemas, ni los tendrá, que nada le importa, que sobrevivirá, que será feliz luego de que llegue su muerte.

-No te entiendo, ¿a qué te refieres con sentimiento?
-Cuando hablo de sentimiento, me refiero al hecho de sentir. No es tan difícil de entender Soul.

Le observo con los ojos ligeramente achinados plasmando en mi rostro una fase de exasperación.
No lo entiendo, por más que lo intente no soy capaz de entenderlo. Sólo necesito sencillas explicaciones, fáciles de entender, no tengo ganas de derrochar parte de mi vida, en estúpidas conclusiones.
No le pido más que... Maldita sea, ¿de qué se ríe?

-Bonitos pensamientos.
-¿Qué? ¿Ahora mis pensamientos ya no son privados?
-Mmh... ¿Cuándo lo fueron?

Genial, genial... Ahora ya no puedo ni bloquear mi masa encefálica, porque el chico lee lo que pienso. Sí, he dicho que voy a bloquear mis pensamientos.
Cojonudo...
Le observo apenas fruncir sus hombros y desaparecer dejando en su lugar un rastro de luz. Un rastro de luz tan bello y perfecto..

-¿Dónde estás?

domingo, 9 de enero de 2011

La sequedad invadió cada recoveco de mi boca.
Las ansias de beber, de apagar el fuego que se depositaba en mi garganta, se hacía cada vez más fuerte.

Parpadeé repetidas veces al hallarme en un sitio completamente desconocido. Busqué con la mirada mi perfecto e impoluto piso céntrico berlinés.
Nada, aquí no es...
Apoyo la palma de mi mano sobre mi esternón, y la deslizo hacia al lateral contrario aferrándome a mi propio pecho. Pero me es imposible elevar mi cuerpo. Me duele, me destruye.

-Quieto ahí bicho.
-¿Qué demon...? ¿Tú otra vez?
-¿Preferías quedarte tirado en medio de la calle?

Frunzo mis hombros y ese acto me produce un dolor interno insoportable. Lo que me provoca, evacuar un gemido desde el interior de mis labios.
El ángel revolotea sus ojos en el interior de sus cóncavas hasta tornarlos en blanco. Sus pasos son lentos y se aproxima hacia mi posición en busca de calmar mi dolor. Presiona mi pecho con la palma de su mano y con suavidad las heridas se cierran de forma automática.
Abro la boca a causa del asombro y le observo por el rabillo una vez me elevo y apoyo la espalda contra las almohadas.

-¿Por qué me ayudas? Somos enemigos desde que existimos. No lo entiendo.

Ignora mi pregunta. Busca algo en algún sitio con la mirada. Mi espada. No la tengo.
La observo bastante demacrada sobre el sofá de la sala. La vista preliminar me permite ver el apartamento con sólo una ojeada puesto que apenas hay paredes que lo dividen.

-Agradable apartamento, pero te he hecho una pregunta. Es descortés no responder cuando me secuestras. ¿No crees?
-¿Secuestrarte? -Ríe perfilando en sus perfectos y delicados labios la sonrisa más perfecta que jamás he sido capaz de captar.- Sería cumplir una de tus fantasías sexuales.
-Ha-ha. ¿Se supone que debo reírme?

Eleva sus hombros sin más nada que añadir.
Inhalo una fuerte bocanada de aire plasmando en mi rostro un gesto de exasperación

-Dímelo.
-No.
-¿Por qué?

Niega suavemente, mientras recorre de rincón a rincón con pasos suaves y perfectos en busca de algo. Frunzo el ceño y me elevo de golpe para reaparecer antes de él.

-¡Te he dicho que me lo digas!
-No sabes tratar a un ángel como se debe.
-Porque me vuelves loco, te lo guardas todo eres... Eres... -Muerdo mi lengua para no seguir hablando, no quiero verle más, es tan idiota..-
-Lo sé, adorable.

Revoloteo mis ojos hasta dejarlos en blanco ya desesperado.

-¿Sigues sin entenderlo?
-Y si no me lo dices, jamás lo entenderé.
-Se llama sentimiento Soul, sentimiento.
A veces, la sinceridad, duele más de lo que deseas.

jueves, 6 de enero de 2011

Contorneó sus pasos para aproximarse sobre mis pies de modo que delimitó su recorrido sentándose a la altura de mi pelvis. Sus ojos se achinaban por momentos y comprendí que tampoco quería matarme. No porque su esencia no se lo permitiera, en absoluto. Si no, que le sucedía exactamente lo que a mi.
Me quería y sentía que me necesitaba a su lado, no como un trofeo más, no como un demonio caído en una simple batalla urbana de esgrima. Ni tampoco colgaría mi espada en su pared con el nombre de Soul sobre una chapa metálica y un par de pinzas sujetadora de estantes, o trofeos, a saber...
Envainó su espada con delicados movimientos, y tan rápido como mi esencia me permitió ver, se alejó perfilando sus pasos delicados y perfectos. Su aura centelleaba por lo cual pude observarlo hasta que se hizo parte del horizonte y  su figura desapareció.
Pestañeé de forma atónita en busca de alguna explicación. Elevé mi cuerpo al apoyarme desde el asfalto y me decanté por envainar mi espada. Pisé el bordillo, y la brisa comenzó a tornarse en viento, el claxon del autobús se tornó irritante en mis oídos y comprendí, que nunca, hay que detenerse delante de un autobús, esté en movimiento o no. Nunca se sabe cuándo el tiempo transcurrirá y te arrolle sin más preámbulos una caja andante de hojalata sobre 8 ruedas. Nunca puedes predecir el futuro, aunque seas uno de los arcángeles más poderoso del infierno, el mismo siervo de Lucifer...

-No te fías de nada.
-Alegación errónea, no me fío de ti.
-Oh vamos...
-Ya sabes lo que dicen de los demonios.
-Ya sabes lo que dicen de los ángeles...
Las últimas palabras que pronuncié, obligaron a perfilar en mi rostro una sonrisa malévola cual solo él podía apreciar. Mientras tanto: el tiempo no transcurría, seguía detenido en ese perfecto crepúsculo.
El musculoso ángel, desenvainó la espada cual colgaba sobre su espada, para colocarla a la altura de mi nuez. No pude evitarlo: por lo tanto gemí de dolor al sentir la esencia angelical del metal cuando éste se dedicaba a destruir los tejidos de mi piel cual ácido.
-¡Maldito bastardo!
Repetí sus actos pronunciados mientras me distanciaba lo justo para ganarle ventaja sobre la situación. Alcé la espada al aire y destello de chispas al mezclarse las esencias, provocó que parpadeara de forma considerable. Apenas deslizo las plantas de mis deportivas por los recovecos y finas planchas de las baldosas que cubren la acera, pisando el filo del bordillo. Su cuerpo se aproxima al mío y de un engañoso paso, caigo sobre el asfalto, apenas sujetándome con las dunas de mis manos. Su mirada fría y distante pero siempre guardando su cualidad angelical, se aproxima hasta mi posición sin dejar de observarme. Acto seguido, presiona el ancho de mi cuello con el filo de la espada.
-Bien, has ganado, mátame.
-No, no puedo, ni quiero.
-¿Por qué? Soy un demonio más.
-A pesar de ser repulsivo, todos nos merecemos una segunda oportunidad.
Siempre es el mismo círculo. Empezamos en un punto indefinido, marcado por alguna cruz en su recorrido. Caminamos de forma desequilibrada, tambaleándonos para cada lado. Llegas a la mitad de tu recorrido, y por un paso en falso, pisas en su superficie, vuelves a subir sobre el trazo curvilíneo para seguir andando, pero te juzgan, por equivocarte. Y lo bueno, el equilibrio, el trabajo que has hecho con anterioridad, se fue a la mierda. No interesa, puesto que lo negativo, siempre pesa y pesará más que lo positivo.


Soul.

miércoles, 5 de enero de 2011

Si el mismísimo Lucifer contemplara esta situación desde lo más profundo de sus infiernos; atravesaría mi pecho con una de sus espadas demoníacas. Pero no puedo detenerme... Ni dejar de contemplarle, es tan perfecto... Sus ojos radiantes de amor, destellan ante mi mirada fría y distante, pero puede con ella, y no le intimido.
Siento como poco a poco, mi cuerpo se derrite a causa de ese calor angelical que desprende éste ser...
Presiono los dedos en el mango de la espada antes de desenvainarla para abatirnos en una mortal pelea... Pero no puedo, no quiero, debo, es mi ley, mi religión -si a esto se le puede llamar religión- su cuerpo... Desprende tanta seguridad que me hiela por completo, permitiéndome a sencillamente repiquetear mis dedos en el mango de hilos dorados y rojos...
-¿Por qué no huyes fiel arcángel?
-Porque huir es de cobardes.
-Debo matarte, pero no puedo.
-No puedes, porque sientes.
-Oh vamos, sólo soy un puñetero demonio.
-Un demonio con sentimientos.
-Debe ser eso, el cambio climático ya no sólo cambia al planeta, si no que a los seres más malvados de ésta jodida existencia.
Se limita a fruncir sus hombros y sostener mi mirada mientras su postura se torna serena y baja la guardia.
Vamos, ahora sería perfecto para atravezarte el pecho.
No tardo ni dos segundos en desenvainar la espada y colocarla a la altura de su pecho, presiono, presiono... Vuelvo a presionar...
-Mátame.
-No puedo, joder, ¡no puedo!

Llega un momento que deseas partir el eje de la tierra cual cristal. Quieres detener el tiempo.
Y sientes que... El mundo se detiene ante tus pies, ya no gira sobre su propio eje, la sucesión de los días y las noches se han detenido en la mitad de un exquisito crepúsculo...
Sólo te limitas a contemplar las gotas de lluvia suspendidas en el aire desafiando la ley de la gravedad. Es fascinante, cuando con apenas la punta de un dedo la tocas y se vuelve humana. Su destrucción es tan dulce que te vuelves loco por destruir cada una de las gotas en suspenso. Y eso haces. Te vuelves adicto por destruir, hacerlo una y otra vez.
Te detienes delante de las personas y gozas del momento. Les contemplas, les robas el dinero que te plazca.
Vuelves a irte, dejas las cosas intactas para que nadie sospeche cuando la vida vuelva a la normalidad pero...
Al final de la acera, encuentras a alguien, ese alguien te contempla desde un punto de vista angelical... Te derrites y te sientes un demonio insensible... No puedes apartar la vista de sus dorados ojos, quieres detenerte, pero es tan tarde, como tarde para volver atrás. El tiempo se detuvo en ese instante para ti y él.
Le sientes... Le quieres con sólo contemplarle.
-No eres bienvenido.
-Lo sé, sólo estoy de pasada.
-¿Por qué?
Se limita a preguntar mientras te contempla desde su punto de vista doloroso.
-Lo siento.
Como fiel siervo demoníaco sólo intentas buscar el perdón con ingratas palabras cuales se lleva el viento aunque éste, permanezca quieto.
-Quiero ayudarte...
-¡No puedes!
Le intervienes mientras el perfecto y delicado ángel te contempla con excelencia, cortesía sin faltarte, pero tú... Tú no eres bueno y destruyes... No eres capaz de amar, ni de sentir. No lo eres.

martes, 4 de enero de 2011

Llega un momento en el que abres los ojos y miras con parsimonia a tu alrededor:
Todo ha sucedido muy rápido.
El tiempo ha pasado.
Has dado un gran paso.
Le has amado y le sigues amando.

Mein offizielles Viertes.
-Quiero que estés mucho tiempo a mi lado.
-No voy a dejarte jamás.
-Jamás.
-Jamás.

lunes, 3 de enero de 2011

"-¿Dónde vas?
-A escribir un cuento.
-¿Un cuento?
-Sí, un cuento.
-Eso es cosa de niños.
-Soñar también lo es.
-Podría discutirlo... Y bien. ¿De qué va ese cuento?
-Es el cuento el que te prometí, sólo que éste te describe a mi lado pero con un final feliz."
Las ganas de gritar, huir y escapar del daño que puédamos provocarle a los demás.
Porque no controlas, porque no puedes evitarlo... Porque sientes que quieres de verdad..

Frozen heart.







Un sentimiento roto, un corazón de hielo, una pérdida, intensa amistad, una fuerte sensación. Cosquilleo, temblores, náuseas, las ganas de querer, amar... Sentir...
Siempre hemos amanecido con un corazón roto, nos hemos tornado fríos por tantas sensaciones contradictorias a las que un día no propusieron, nos engañaron, nos dijeron y hemos caídos cuales buenos enamorados pero claro... Un corazón no aguanta lo suficiente, tantas mentiras, palos tan fuertes y... Tiende a romperse. Es cuando una intensa oscuridad plena en tu interior, dejas de sentir, te angustias, y deliras en busca de divagaciones a ese ser predilecto que añoramos al despertar de una pesadilla una noche tormentosa, palpamos la cama y yace fría.
Es cuando... Ignoramos la existencia de un fuerte sentimiento, pero aparece tan repentino, nos ahogamos, el aire deja de existir, y el único material físico tibio que más cerca sentimos, es el líquido que desprenden nuestros lacrimales. Esas engañadoras lágrimas que siempre nos traicionan cuando no lo deseamos.
Y entonces... Por una fuerza exterior, te elevan del suelo, te regalan una sonrisa, te secan las lágrimas... te ruegan que dejes de llorar, que no vale la pena..
Intentas por todos los medios que desaparezca, que no te vea tan débil, en una situación tan sensible, tan real... Tan tú.
Pero no le importa, sólo le interesa saber si estás bien, si puedes respirar, te entiende, no se burla, simplemente, quiere ayudarte, animarte, evadirte de tanto daño.
Pero sabes que sí, que es él. Tu conocido, tu colega, tu amigo, simplemente él.
Te agrada, le adoras, le quieres y finalmente... El sentimiento crece... Intentas detenerlo pero...
Le amas... Y él ha descongelado tu corazón.








Little perfect guy.

domingo, 2 de enero de 2011







Las ganas de gritar, huir, morir, vivir, desaparecer, llorar, reír, destruir, construir, escapar, matar, comer, follar, dormir, levantarse, rutina.
Sobrevivir..
Resistir.
No abandonar nunca.

Perderse, encontrarse, amar, odiar, besar, escupir, negar, acertar, fallar, sentir, rechazar...
Drogarse...

Es tan sencillo introducir en tu cuerpo agentes negativos causantes de las deliraciones, te intentan evadir de una realidad que cada vez que vuelves en si, aumenta en aspecto negativo. Destruyendo lo que poco a poco los demás han construido para verte sonreír una vez más.

Gritar.
Perderse.
Despertar.

Wake up.
La vida continúa, no se detiene, no espera ni por ti, ni por mi.
No hace favoritismos ni excepciones. Sigue, no te detengas.
Mas permanecerás en un eterno olvido sin retorno.